Porsche cumplió los pronósticos y mutó su Macan a un SUV 100% eléctrico. Apuesta arriesgada la de quedarse sin motorizaciones híbridas o de gasolina para atraer a los clientes más tradicionales, pero necesaria para poder sobrevivir a las políticas anticontaminación de la Unión Europea. Los puntos fuertes del modelo son diseño, deportividad, batería de gran capacidad y altas velocidades de recarga.

Adiós a la gasolina
Las necesidades de un coche 100% eléctrico son completamente distintas a las de un gasolina con lo que, a la hora de crear el nuevo Macan, Porsche tuvo que partir de una hoja en blanco. Se ha desarrollado una nueva plataforma denominada PPE con una batalla 86 mm superior y una anchura 16 mm más amplia, con el fin de hacer hueco a la gran batería que incorpora el modelo. La longitud del Macan es ahora de 4.784 mm (+ 58 mm) y su altura es de 1622 mm (+1mm. Con estas medidas, tenemos un coche más grande y con un espacio interior muy superior.

Lluvia de kW
La batería (de iones de litio) que van a equipar estos Macan es de nada menos que 100 kWh, de los que son útiles 95. La arquitectura eléctrica usada es de 800 voltios y también se estrena en este nuevo Macan. Las potencias de carga son muy elevadas, de hasta 270 kW en corriente continua y de 11 kW en alterna. En los cargadores que lo permitan en un futuro, se podrá cargar de un 10% al 80% en 21 minutos.
Los Macan equiparán dos motores imanes permanentes de nueva generación, que irán colocados uno sobre cada eje. Porsche ha querido destacar de ellos su mayor eficiencia y una capacidad de recuperación de energía de hasta  240 kW. La potencia máxima conjunta de estos motores llega a ser de 639 CV en la versión Turbo (los de marketing de Porsche no tienen vergüenza), y se queda en 404 CV para la versión 4. 

Más aerodinámico y menos original
Sabemos que Porsche últimamente no arriesga mucho en diseño, y para el Macan no se ha vuelto loca. El concepto estético es el de un SUV deportivo, y en él se combinan elementos ya vistos en otros modelos de la gama (faros del Taycan, trasera del Cayenne), con alguno nuevo como el paragolpes delantero. El frontal es la parte más agresiva del coche, con un capó que apenas tiene inclinación, unos faros situados en la parte superior de las aletas y un paragolpes que empieza muy arriba. Integra unos segundos grupos ópticos situados en sus extremos y tiene una entrada de aire central situada en su parte inferior. El resto del coche es más elegante que deportivo, a excepción de las molduras laterales y de las llantas de aleación. Se ha trabajado mucho en afinar la aerodinámica, declarando la marca un Cx. de 0,25 (antes 0,35), un valor realmente brillante. A dicho valor contribuye también la aerodinámica activa del coche, con tomas de aire que se cierran cuando no son necesarias delante y un alerón activo sobre el maletero trasero.

Interior espectacular
Lo mejor en cuanto a diseño, sinceramente, creo que está en el habitáculo. El salpicadero de los nuevos Macan está en la línea de los Cayenne o los Taycan: muy tecnológico, extremadamente bien rematado y verdaderamente bonito. Se disponen de hasta cuatro pantallas y todas ellas de buen tamaño y bien integradas: la del conductor (12,6”) y dos de 10,9” para la consola central y el acompañante. La cuarta sería la del climatizador, que conserva los mandos físicos.

En cuanto a capacidad interior, es de esperar un aumento considerable del espacio para las piernas de los pasajeros de las plazas traseras, y algo más de anchura general. El nuevo Macan dispone de un maletero trasero de hasta 540 litros y uno delantero de 84 litros.Dos versiones y mucha aceleración
De partida, la nueva generación del Macan sale en dos versiones:
– Macan 4, entrega 408 CV y un par motor de 650 Nm, con una aceleración 0/100 en 5,2 segundos y una velocidad máxima de 220 Km/h. El consumo medio homologado está entre 17,9 y 21,1 kWh, lo que le permitirá una autonomía de hasta 614 Km.
– Macan Turbo (maemía no puedo con este sacrilegio), que tiene 639 CV y un par motor de 1.1300 Nm, con una aceleración 0/100 en 3,3 segundos y una velocidad máxima de 260 Km/h. El consumo medio homologado está entre 18,8 y 20,7k Wh, lo que le permitirá una autonomía de hasta 591 Km.

Para domar esta lluvia de kW, el nuevo SUV de Porsche pone a disposición del conductor dirección a las cuatro ruedas, tracción total, un control de tracción específico y el torque vectoring para el eje tradero. En opción se podrá optar por suspensión neumática activa con amortiguadores de acero de mejor rendimiento.
Se acaban de dar a conocer los precios y, como era de esperar, no son precisamente baratos. El Macan 4 empieza en 85.382 euros y para acceder al Turbo habrá que poner encima de la mesa del concesionario correspondiente un mínimo de 116.914 €. Son muchos euros, pero estamos hablando de un coche muy completo y que se llama Porsche.

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