Los amantes de los deportivos “de verdad” estamos de enhorabuena. Toyota, la marca que lleva 25 años martirizándonos con sus eficientes, sosos y prácticos híbridos, vuelve a intentar compensar su “afrenta” con la actualización del Supra y el lanzamiento de una serie especial llamado A90 Final Edition.

Recordemos que este modelo nacido en 2019 fruto de su colaboración con BMW. Comparte con el Z4 alemán el chasis, los motores y la caja de cambios. Pero se diferencia de su gemelo alemán por ser un coupe de espectacular estética japo, mientras que el BMW es un cabrio de elegante.

Interiormente también hay notables diferencias en el diseño del salpicadero, paneles y asientos, si bien aquí se comete el típico error de compartir ciertos mandos muy visibles que chirrían en un interior muy japonés.

Con todo, el Supra es un coche diseñado para hacer disfrutar, más por sensaciones que por efectividad pura. Es un muy buen GT. Los motores BMW y las cajas de cambio ZF son una maravilla, proporcionando cifras de aceleración fantásticas y un sonido maravilloso (en el caso del 6 cilindros de 340 CV). El chasis permite una conducción deportiva y divertida, pero la verdad es que no es lo más efectivo que ha creado BMW.

En Toyota eran conscientes de ello, y han querido lanzar una edición final mucho más radical del modelo. Se llama A90 Final Edition y estará limitada a 300 unidades y tiene numerosos cambios pensados para satisfacer a los amantes de las sensaciones fuertes.

Disponible en exclusiva con el motor de 6 cilindros y 3 litros, la potencia mejora drásticamente, ya que pasa a disponer de 435 CV (+ 95 CV ). El par también aumenta, pasando a 570Nm (+60 Nm). Con buen criterio, este A90 Final Edition solo está disponible con la caja de cambios manual de 6 velocidades, a buen seguro de tacto celestial.

El sistema de frenos está firmado por Brembo ha sido mejorado con discos flotantes perforados, pastillas de mayor rendimiento y latiguillos de acero inoxidable.

Por su parte, la suspensión incorpora amortiguadores KW regulables (16 etapas de rebote y 12 de compresión), estabilizadoras reforzadas y silentblocks más rígidos. En general, todos estos cambios provienen de la versión GT4 del modelo japonés.

Incorpora llantas de 19 pulgadas delante y de 20 detrás en medidas 265/35 ZR19 y 285/30. Unos auténticos rodillos proporcionados por Michelin, concretamente de su modelo Pilot Super Sport Cup2

A nivel aerodinámico, la carrocería incorpora un lip delantero completo, canards en las aletas delanteras y un alerón trasero adicional de grandes dimensiones. Todos estos elementos fabricados en fibra de carbono de gran calidad.

En el interior, parte del panel de la puerta, la consola central y el asiento del conductor están tapizados en Alcantara de color rojo, creando un precioso contraste con el resto del interior negro.

Como puedes ver, el A90 Final edition es un GR Supra muy especial. Solo se fabricarán 300 unidades y con un precio muy elevado (no facilitado). Lamentablemente, no creemos que Toyota la comercialice en Europa, por la peculiar política medioambiental que rige nuestro continente. Una auténtica pena.

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